viernes, 20 de octubre de 2017

19 de octubre del 2017  Hoy es el día de Dayuma

Por la mañana voy a la Fundación Labaka, donde con Washo vamos introduciendo documentos en el disco duro Una cosa que nunca había hecho, pero que resulta interesante, además de un seguro para que nadie ajeno a la Fundación pueda hacerse con documentos importantes.

A las 10 de la mañana partimos con Washo y Adrián hcia Dayuma. En el camino se nos unirá Alonso. En el kilómetro 40 de la Vía Auca se encuentra Dayuma. Pero antes de llegar a esta población pasamos por la sede de Petroecuador. Aquí vemos un  buen grupo de gente, lo cual nos deja un poco perplejos.

A las 11 de la mañana llegamos al coliseo de Dayuma. Aquí estaba prevista la reunión con los ministros cuyas carteras tienen que ver algo con el problema que nos ocupa. Allí no aparece ningún ministro ni nada parecido. Posteriormente nos enteramos de que la reunión para negociar respecto al problema del paro, motivado por la condiciones lamentables en las que viven los obreros del petróleo, se estaba llevando a cabo en la sede de Petrogras y que no había aparecido ningún ministro.

El coliseo, lugar en el que iba a desarrollarse la asamblea, se va llenando de gente y toman la palabra dirigentes de las nacionalidades kitxua, uhao, shwar y el dirigente de CONAIE (agrupación de las comunidades y nacionalidades originarias del Ecuador); así mismo intervienen los dirigentes de las comunidades de Dayuma, El Dorado, Taracoa e Inés Arango -poblaciones afectadas por este tema-.
De repente, y como para dar fuerza a la acción, se presenta un buen grupo de shwars, de la comunidad de Inés Arango, gritando, elevando lanzas a lo alto y rodeando la mesa preparada para la intervención de las diversas autoridades. Son lanzas de chonta -del tipo de las que acabaron con las vidas de Alejandro e Inés-. El espectáculo que montan es impresionante y yo, que nunca he visto algo similar, me siento un  poco cohibido.

El paro, promovido por temas laborales, ha tomado claramente un tinte político. Cuando estaba todo en evolución, al pil-pil, los shwars de la comunidad de Inés Arango se van de la asamblea y aquello va in crescendo. El dirigente de CONAIE da un mitin con una dureza enorme, diciendo a voz en grito, que él había venido a unir a las comunidades y que se va enfadado por no haberlo conseguido.

Habla a continuación la "alcaldesa" de Dayuma, diciendo que se ha sentido ofendida, pues la han atacado con una lanza anteriormente y que ella no puede hacer nada, que no se ha llevado ni un $ de las arcas de la comunidad y que en nombre del buen Dios quiere que se solucionen los problemas desde donde se pueden solucionar, el gobierno de Quito.

La cosa se va diluyendo y nos vamos los cuatro a almorzar. Yo me he comido un buen plato de arroz con tropiezos de marisco. Estaba buenísimo.   

Nos vamos decepcionados de Dayuma, porque no se ha conseguido nada, y por la irresponsabilidad del gobierno de no acudir los ministros correspondientes a la cita.

Son las 11 de la mañana y así se encontraba el coliseo, casi vacío. Es precioso el mural del fondo.
Al fondo, a la derecha, aparece una pancarta que dice "Comunidad parroquial Inés Arango presente!. Comunidad es el conjunto de habitantes de una parroquia, que no tiene connotación religiosa sino política.
Aparecen un buen número de hombres y mujeres con sus lanzas alzadas hacia el cielo. 

Ya está preparada la mesa para el diálogo, pero faltan los shwars, que no se sentarán en ningún momento para dialogar.
El dirigente de la CONAIE expresa su enfado por no poder ponerse a dialogar por ausencia de los shwars. 
Este es el edificio de la municipalidad de Dayuma.
La ley prohibe circular más de dos personas en una moto, pero la policía hace la vista gorda. En este restaurante almorzamos.
A lo largo de la Vía se pueden ver arbolitos plagados de flores tan hermosas como estas.
En el camino de regreso a Coca hemos entrado por un camino que a lo largo de 6 kms. nos va llevando por lugares de pura selva hasta una bifurcación en la que dejaremos a Washo. En ese momento aparecen dos hijos y una hija con dos caballos. En ese lugar cargarán los caballos con cemento y durante media hora de caminata llegarán por fin al lugar en el que vive. 




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